Innovación
La iniciativa Jakarta Smart City (JSC, Jakarta Ciudad Inteligente), que tiene como base un sofisticado "Smart City Lounge" con una gigantesca pantalla digital, se encarga de realizar las típicas funciones de recopilar y mostrar datos sobre los servicios de la ciudad. Pero a diferencia de un típico centro de operaciones, JSC es una herramienta concebida y diseñada en torno a un gobierno abierto -incluyendo el acceso a la información, la participación ciudadana y la rendición de cuentas- con un enfoque experimental y ágil. Combina los datos abiertos de las unidades de trabajo municipales con datos procedentes de los ciudadanos. Además, capta vorazmente nuevos flujos de datos a medida que se encuentran disponibles. Muestra información sobre el porcentaje de respuesta de que dan los funcionarios a las quejas. Y el mismo mega-tablero de control contiene una función pública en la que los desarrolladores y start-ups pueden conocer los problemas del gobierno y proponer soluciones.
Desafío Democrático
Los líderes de las ciudades de todo el mundo se esfuerzan por mejorar, ampliar y modernizar los servicios públicos básicos a medida que las poblaciones urbanas crecen y cambian. Muchos creen que tener mejor información es crucial para identificar problemas, propiciar respuestas rápidas y formular políticas más informadas. Como resultado, los sofisticados sistemas de gestión de datos que se muestran en los "centros de operaciones" o "centros de control" están proliferando en un número cada vez mayor de ciudades. Sin embargo, estos con frecuencia están desconectados de los mecanismos de transparencia, rendición de cuentas y participación ciudadana, lo que suscita preocupación por la creciente vigilancia y control estatal.
¿Cómo lo hicieron?
Los indonesios tienen una gran pasión por los teléfonos inteligentes y las redes sociales, , y el país se ha convertido en los últimos años en un laboratorio líder de aplicaciones de crowdsourcing para el servicio público. En 2011, incluso antes de que la plataforma FixMyStreet del Reino Unido se globalizara, el gobierno indonesio lanzó una plataforma nacional para que los ciudadanos informaran en línea llamada LAPOR!. Los indonesios se sumaron masivamente a la aplicación Waze, con lo que crearon una de las mayores bases de usuarios del mundo. En 2014, investigadores de la Universidad de Wollongongong se asociaron con la Oficina de Gestión de Emergencias de Yakarta para construir Peta Yakarta, una herramienta para mapear los tweets relacionados con las inundaciones en la ciudad. (Este proyecto ha sido integrado a Peta Bencana, una plataforma regional de código abierto orientada a la respuesta a emergencias y desastres en general).
Ante la proliferación de herramientas, el gobierno de Yakarta vio la necesidad de crear una plataforma que integrara y publicara fuentes de datos internas y externas. Así que, en diciembre de 2014, el entonces gobernador Basuki "Ahok" Tjahaja Purnama lanzó la plataforma de datos Jakarta Smart City (JSC). La iniciativa de JSC busca integrar los datos de LAPOR, Peta Jakarta, Waze y Twitter con fuentes de datos del gobierno de la ciudad como los datos de cámaras de circuito cerrado de televisión y los registros departamentales recientemente creados en el marco de una reglamentación de 2014. El mapa resultante de la actividad de Yakarta se puede ver en http://smartcity.jakarta.go.id/maps/.
Pero al lanzar la plataforma Jakarta Smart City, la ciudad también agregó dos herramientas más al arsenal de herramientas: la aplicación CROP desarrollada por la ciudad (que fue reemplazada por Gestión de Atención al Ciudadano (Citizens Relation Management, o CRM, en 2017) para que los funcionarios del gobierno puedan hacer un seguimiento de los progresos realizados en la tramitación de las quejas y reportarlos; y la aplicación comercial para presentación de quejas Qlue, que fue concebida específicamente para los ciudadanos. (La ciudad utiliza Google Enterprise, que facilita la integración de herramientas de Google o provistas por Google como Waze y Qlue).
La ciudad creó una nueva unidad administrativa, la Unidad Ejecutiva Técnica de Jakarta Smart City, para coordinar la implementación y reducir la burocracia a fin de completar el círculo entre los datos abiertos, las denuncias de los ciudadanos y las mejoras de los servicios. "No podemos tener una respuesta más rápida sin tener una mejor capacidad para escuchar", dijo Setiaji, jefe de la Unidad de JSC, en 2016. "Sin esta capacidad y voluntad de escuchar, la gente no participará. Tenemos datos estadísticos que indican que sólo el 30 por ciento de las quejas son objeto de seguimiento. Pero necesitaremos tiempo, probablemente, para mejorar de manera considerable." Con Setiaji a la cabeza, JSC habla el lenguaje de “gobierno como plataforma” que ha fomentado tanto el activismo de gobierno abierto en la era de Internet.
Por último, la ciudad exhibe su gigantesco panel de control en un nuevo espacio público, el "Smart City Lounge" del Ayuntamiento, que incluye espacios de trabajo conjunto y es la sede de una hackathon anual, #HackJak, que busca tender un puente entre la tecnología de la ciudad y los equipos de planificación urbana. "La gente inteligente es la prioridad", dijo un funcionario de planificación. "¿Cómo podemos empoderar a la gente para que acceda a los otros pilares [de una ciudad inteligente]? Esto es lo que nos gustaría imaginar a través del programa Smart City". Antya Widita, Gerente de Innovación y Colaboración de Open Data Lab Jakarta, compartió este sentimiento, diciendo que prefiere el concepto de "ciudad abierta" al de "ciudad inteligente". Si se habla de una "ciudad inteligente", sólo se relaciona con la tecnología", dijo Widita. "No es del todo equivocado, porque es inteligente usar la tecnología para vigilar la ciudad. Pero falta la apertura, falta la colaboración de los ciudadanos".
Todo esto está todavía en proceso, como señaló el Centro de Políticas y Gestión de la Innovación (CIPG) en un informe fundamental de 2016 sobre el esfuerzo de la ciudad en materia de datos abiertos. Los desafíos incluyen asegurar que los datos oficiales de todas las unidades de trabajo sean de alta calidad y se compartan; incorporar CROP a Jakarta Smart City; y proporcionar una interfaz de usuario fluida y con una marca bien diferenciada (tanto para el público como para los trabajadores de la ciudad) que oculte la complejidad de las herramientas de datos que se encuentran detrás del escenario.
¿Cuál es el avance?
Mostrar (e instituir) una nueva forma de hacer las cosas. Los investigadores del Centro de Políticas y Gestión de la Innovación (CIPG), si bien señalaron los desafíos y el trabajo pendiente, concluyeron que Jakarta Smart City creó un nuevo modelo de comunicación entre los ciudadanos y su gobierno. "Fue bueno y se hizo de manera integral", dijo la ex Directora de Operaciones de CIPG, Dinita Andriani Putri, en 2016. "Porque estaba respaldado por un reglamento. Obligó a todas las unidades de trabajo a abrir sus datos, [especificó] qué tipo de datos, [y] requiere que todas las unidades de trabajo gestionen sus datos correctamente".
Consideraciones
¿Más datos, más problemas? La ciudad demostró un compromiso con el gobierno abierto y sus directivas han sido ambiciosas. Pero la gestión de datos nuevos y complejos es un reto, y presenta problemáticas nuevas en todos los aspectos, desde determinar la propiedad y el intercambio de los datos hasta ejercer el control de calidad, desarrollar la capacidad del personal y garantizar que los principales departamentos de la ciudad utilicen realmente los datos para el análisis, la planificación y la elaboración de informes internos. La JSC no se propuso recopilar e integrar datos para su propio beneficio; el propósito era aumentar la capacidad de respuesta de la ciudad y servir mejor a los ciudadanos, y el impacto en ese aspecto aún no está claro.
Asimilación al interior de la Alcaldía. Varios observadores señalaron el desafío de convertir los datos en información utilizable y destinada a la elaboración de políticas públicas una vez que esta información esté abierta y disponible - una idea común entre los defensores de los datos abiertos en todo el mundo. "[Qlue está] aumentando la participación ciudadana y proporcionando nuevas herramientas para evaluar el trabajo de los funcionarios públicos", dijo Putri de CIPG. "El principal problema es la gestión de datos en el interior de las oficinas. No se centran en la gestión de datos, en cómo pueden usar estos datos provenientes de los ciudadanos".
Integración de plataformas. Es evidente que es necesario encontrar un equilibrio entre ofrecer a los ciudadanos múltiples vías para presentar denuncias y ofrecer y promocionar un punto de acceso claro y fácil de usar. A pesar de los esfuerzos por crear y promocionar un portal integrado, muchos ciudadanos siguen prefiriendo utilizar Twitter o el correo electrónico para contactar a la alcaldía.
Incursión al campo de la vigilancia. En diciembre de 2016, la policía que opera en el sur de Yakarta lanzó una aplicación, integrada con Qlue, para invitar a los ciudadanos de esa zona a denunciar el uso indebido de drogas, un esfuerzo de la unidad de narcóticos para "intensificar nuestros esfuerzos e involucrar al público". Esta es una divergencia fundamental, y posiblemente polémica, con respecto al modelo de Qlue y Jakarta Smart City como una forma de abrir el gobierno de la ciudad, responsabilizar a los trabajadores de la ciudad y asociarse con los ciudadanos para mejorar los servicios de la ciudad.