Innovación

En 2014, el alcalde Bill de Blasio anunció su plan de lanzar el programa de carné de identidad municipal más grande de los Estados Unidos, IDNYC, que es un documento de identificación seguro emitido por el gobierno y disponible para todos los residentes de la ciudad de Nueva York de 14 años de edad en adelante. En una era de extrema disparidad de ingresos, el programa IDNYC es un motor de mayor equidad cívica, cultural y económica para todos los neoyorquinos, sin importar sus ingresos o su estatus migratorio. El documento de identidad proporciona a los residentes acceso a los servicios municipales y a los edificios públicos. Facilita las interacciones con la policía local; puede utilizarse como carné de biblioteca en todas las bibliotecas públicas de la ciudad de Nueva York; y las instituciones financieras participantes aceptan el IDNYC como identificación principal para abrir una cuenta. En resumen, este carné con foto, gratuito y fácil de obtener, puede ser utilizado por los residentes locales para moverse por la ciudad en caso de no tener otra identificación oficial, como, por ejemplo, una licencia de conducir. Los carnés son muy fáciles de conseguir, pero también mantienen los estándares de integridad aprobados por la Policía de Nueva York, que requieren una autenticación rigurosa de los documentos que los solicitantes presentan para probar su identidad y residencia.

El carné no es sólo para neoyorquinos que no cuentan con una identificación emitida por el gobierno, incluyendo a sus más de 550,000 residentes indocumentados, y el número desproporcionadamente alto de residentes de la ciudad de Nueva York sin licencia de conducir. El carné IDNYC ofrece importantes alianzas y membresías gratuitas o con descuento a instituciones culturales, descuentos en medicamentos recetados, entradas de cine a precio reducido y membresías para gimnasios, entre otras cosas. Estos beneficios han hecho que el atractivo de los carnés sea mucho mayor, y el pasado mes de marzo, el programa superó el millón de tarjetahabientes, sólo dos años después de su lanzamiento. La gran participación de los residentes es esencial para asegurar que el IDNYC no se asocie inmediatamente con el estatus migratorio y que no se vea afectado por el estigma, lo que a su vez permite que el carné sea un" producto de primera necesidad" para todos los residentes de la ciudad que disfrutan de los beneficios de los carnés de identidad.

Desafío Democrático

Las megaciudades acogen a diversas comunidades, incluidos muchos grupos que tienen dificultades para obtener una identificación oficial o que carecen de acceso a los documentos necesarios. Estos grupos incluyen a inmigrantes indocumentados, personas sin hogar, personas inconformes de género y personas transgénero, sobrevivientes de violencia doméstica y otras que simplemente no han obtenido una identificación oficial del gobierno.  La participación plena en la vida cívica -desde abrir una cuenta bancaria e inscribirse en la escuela, hasta interactuar con la policía o acceder rápidamente a las historias clínicas- puede depender de estos carnés de identidad. La falta de un documento de identidad aceptable hace que todas estas actividades sean mucho más problemáticas para grandes segmentos de la sociedad.

¿Cómo lo hicieron?

El alcalde De Blasio estableció un ambicioso cronograma de seis meses para la implementación del carné IDNYC, que requiere un alto nivel de colaboración entre los socios del gobierno, los grupos comunitarios y los proveedores. Los estándares de seguridad del programa se basaron en los del Departamento de Vehículos Motorizados (DMV) del Estado de Nueva York, la Administración de Seguridad en el Transporte (TSA) y el FBI.  En consulta con el Departamento de Policía de la Ciudad de Nueva York, IDNYC diseñó un "sistema de puntos" para establecer la identidad de un solicitante que es a la vez riguroso y accesible a los no ciudadanos, a los neoyorquinos sin hogar y a otras personas. La ciudad de Nueva York mantiene 20 centros de inscripción permanente en los cinco municipios; hasta cuatro centros de inscripción “efímeros” (pop-up) en determinadas épocas; y la solicitud para obtener el carné toma en promedio menos de 15 minutos. Para los residentes que no pueden salir de su casa, IDNYC puede enviar una unidad de inscripción móvil que procesa las aplicaciones de forma remota.

La clave para el diseño del programa fue asegurarse de que el carné no estuviera estigmatizado. El beneficio de los museos y otros beneficios han sido un atractivo para aquellos neoyorquinos que no necesitan el carné como forma de identificación, pero cuya participación es vital para asegurar que el IDNYC no se asocie únicamente con el estatus migratorio de cada persona o con una incapacidad similar para obtener un documento de identificación expedido por el gobierno. De hecho, hubo tanta demanda de carnés por parte de los neoyorquinos que la Municipalidad tuvo que aumentar rápidamente la capacidad de inscripción, contratar más personal y obtener equipo adicional.

¿Cuál es el avance?  

Hasta la fecha, más de un millón de neoyorquinos se han convertido en titulares de carnés. Según una evaluación del programa realizada/lanzada en 2016:

• 58 por ciento de los titulares de carnés IDNYC utilizan el carné como una forma de identificación (70 por ciento de titulares de carnés inmigrantes).
• 50 por ciento dijo que IDNYC era su documento de identidad más utilizado (67 por ciento de titulares de carnés inmigrantes).
• 25 por ciento dijo que IDNYC era su única forma de identificación con foto en los Estados Unidos (37 por ciento de titulares de carnés inmigrantes).

Asimismo, el 97 por ciento de los titulares de carnés indicaron múltiples razones para obtener un carné IDNYC. Setenta y uno por ciento de los encuestados dijeron que habían obtenido un IDNYC "para manifestar su apoyo al programa"; 68 por ciento dijeron que obtuvieron el carné para acceder a membresías y otros beneficios; y 22 por ciento dijeron que obtuvieron el carné para auto-designar su género.

Consideraciones

¿Cuáles son las mejores prácticas para llegar a los residentes de las ciudades que pueden carecer de estatus migratorio legal?   

¿Cómo pueden los beneficios para las poblaciones vulnerables seguir siendo una prioridad, sin estigmatizar el carné?